La mayoría de los empresarios saben que hoy día hay que estar en Internet, pero muchos no saben cómo. Aquí explicaré los mínimos requisitos para hacer negocio por Internet. Una excelente forma de comenzar es a través de una página web corporativa. En ella mostramos quiénes somos, qué hacemos, cómo trabajamos y dónde estamos: lo esencial para que cualquier persona pueda conocer nuestra compañía.
Como puede imaginarse, existen distintos niveles de presencia en Internet, pero lo básico son tres cosas:
1. Registro de Dominio
Es el nombre por el que se va a conocer nuestra compañía o marca en Internet; lo que escribimos en la barra del navegador cuando alguien quiera visitar la página web. La estructura habitual es:
La última parte del nombre (.com) hace referencia al tipo de empresa o su ámbito geográfico: «.com» para empresas y marcas comerciales en general; «.net» para empresas relacionadas con internet e informática; «.es» para empresas españolas; «.org» para organizaciones vecinales u ONG’s, etc.
2. Diseño de la página web
Es el diseño, propiamente dicho, del sitio web. Son muchas las herramientas disponibles para el desarrollo de un sitio web. Lo importante es que el producto que obtengamos responda a nuestras necesidades y sea atractivo al visitante.
3. Alojamiento
Decimos «página», pero en realidad es un sitio web. De manera que un sitio está compuesto por un conjunto de páginas. Todas las páginas web y las imágenes que aparecen en ellas están contenidas y organizadas en una carpeta, con sus correspondientes subcarpetas. Esa carpeta debe estar guardada en una especie de ordenador, denominado servidor, para que cuando escribamos la dirección en el navegador (www.agenciausm.com) pueda ser encontrada y muestre el contenido al visitante.