Growth Hacking es una técnica de marketing cuyo objetivo básico es el crecimiento rápido de una empresa con pocos recursos (relativamente), haciendo uso de diferentes herramientas, muchas de ellas gratuitas o muy económicas, para, de forma combinada, hacer crecer el número de clientes, suscriptores, afiliados o cualquier factor de tu negocio que necesite incrementar su valor.
El término está compuesto por dos palabras anglosajonas: growth (crecimiento) y hacking (adquisición de datos, que en este caso siempre es legítima). El profesional que domina esta técnica debe ser un gran conocedor de las herramientas de marketing disponibles en el mercado, de las redes sociales y por supuesto comprender los objetivos de las empresas que lo contratan, sus productos, el sector y todos aquellos factores que debe tener en cuenta para el diseño de la estrategia a seguir.
En el Growth Hacking es muy importante la experimentación a través de acciones concretas que sean medibles y de ese modo saber si han fiuncionado o no, descartando las que no van bien y potenciando las que sí proporcionan los resultados deseados.
Estructura de la técnica Growth Hacking
Al final, el Growth Hacking no es más que un conjunto de acciones y planteamientos basados en la necesidad de conseguir unos objetivos empresariales. En este conjunto están la creatividad, el análisis y el uso de entornos digitales y herramientas específicas, todo ello aplicado con sentido común y trabajo constante, mediante continuos ensayos de acierto y error. Un buen Growth Hacker aprovecha lo mejor de las herramientas asequibles del mercado, combinándolas entre ellas con gran habilidad para obtener buenos resultados con la mínima inversión económica.
Vamos con un ejemplo. En nuestra empresa necesitamos aumentar el número de clientes. Conocemos el sector, analizamos nuestras fortalezas y debilidades, analizamos a los clientes potenciales, y trazamos un plan estratégico a desarrollar en un tiempo determinado. Para llevar a cabo la estrategia utilizamoa unas técnicas y canales, como pueden ser:
- Marketing de contenidos.
- Email marketing.
- Posicionamiento SEO y SEM.
- Redes sociales.
- Webinarios para formación.
- Pertenencia a asociaciones sectoriales de interés estratégico.
- …
Cada una de las técnicas y canales de arriba arrojan resultados que debemos medir y analizar para sacar conclusiones sobre la efectividad de las acciones desarrolladas. Estas conclusiones nos orientarán sobre en qué dirección debemos dar el siguiente paso. Y así sucesivamente.
Como puedes intuir, el Growth Hacking es un sistema que puede dar buenos resultados, pero que necesita de un tiempo mínimo y constancia. Nuestra recomendación es que busques un buen profesional en este campo y que le plantees un proyecto realista, dentro de las posibilidades de tu negocio. Lo importante es iniciar el camino que te irá llevando progresivamente hacia una mayor y mejor reputada presencia online.
